Después de una "breve pausa comercial" ( el hombre araña ) volvemos a reencontrarnos con el mejor Sam Raimi, el del terror serie B con magistrales toques gore y esa infaltable pincelada bizarra, y aunque no se supera a si mismo después de la zaga Darkman, el rostro de la venganza, con su ultima entrega Arrastrame al Infierno logra tomar pocesion de un lugar bien ganado en el cine desde su ya lejana El ejercito de las tinieblas.
La cinta protagonizada por una muy correcta Alison Lohman, nos lleva por los espeluznantes días que vive una gris funcionaria bancaria luego de que se convierte en víctima de una maldición gitana al negar la renegociacion de una hipoteca a una desagradable vieja rumana. De ahí en adelante se vera envuelta en una serie de eventos paranormales que la llevan camino a un trágico fin en donde el factor "sorpresa" del final añade patetismo al personaje y a la historia.
Narrada dentro de los moldes clásicos del genero, con fuertes pinceladas gore y bizarras, cumple cabalmente con lo que se pide del genero y confirma el buen momento de un director ya icono y referente del cine actual.
Jose Luis A.
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